Cuidemos la salud en el trabajo

Con unos sencillos tips, podemos potenciar el cuidado de nuestra salud de manera que no se vea afectado por nuestro desempeño laboral.

Muchas veces nos dejamos llevar por la rutina diaria y las obligaciones laborales, y no le damos la importancia necesaria a tomarnos unos minutos al día para reenfocarnos en nosotros mismos.

Un cuerpo y mente en buen estado son esenciales para la efectividad en nuestras labores diarias, y con respetar ciertas actividades de manera continua, evitaremos muchas consecuencias a futuro para nuestro estado físico y mental:

Dormir bien: el sueño proporciona la energía necesaria para afrontar cada jornada laboral. Dormir es indispensable para el bienestar físico e intelectual.

Moverse: El trabajo sedentario entraña numerosos problemas y enfermedades, por eso es muy necesario levantarnos temprano regularmente para desentumecer el cuerpo.

Cuidar los ojos: nuestros ojos soportan las tensiones de nuestro ritmo de trabajo frente a la pantalla. Haz pausas de 5 minutos, cada 45 minutos, para evitar la fatiga visual.

Buena postura: Varía tu posición y ponte de pie cada 2 horas para estirarte; con esto ayudarás a mejorar tu circulación. Realiza tareas diferentes durante tu jornada y reducirás las tensiones y el malestar general.

Evitar grandes pesos: las lesiones de espalda son problemas comunes que pueden evitarse con las posturas correctas. Evita levantar pesos extremos por encima de tus hombros o por debajo de tus rodillas.

Buena alimentación: muchas veces descuidamos la alimentación por falta de tiempo y por el acelerado ritmo diario. No comas en tu puesto de trabajo, respeta la pausa de la comida, sal de la oficina y cambia de aires.